miércoles, 2 de abril de 2008

Desde mi ventana, nuevamente


Me encanta la luz. Lo primero que hago todas las mañanas, nada más despertarme, es subir las persianas y dejar que entre claridad (aunque esté nublado, da igual). Me gusta mirar el misterioso cielo: sus infinitos colores, sus cientos de nubes de formas bien diversas.

De las cosas cotidianas que más placer me producen (con diferencia y cuando es posible) es el desayuno en la terraza, estrenando un nuevo día como si no tuviera nada que ver con el anterior. Respirar el primer aire de la mañana, oír los pájaros, escuchar como el mundo se pone, poquito a poco, en marcha.

Y es que, la luz, me alegra y me da vida. Desde el domingo, con el cambio horario y el anochecer más tardío, me siento otra. Me gusta el buen tiempo, el no llevar tanta ropa, el ponerse a la sombra y sentir el fresco, los días largos, ...

2 comentarios:

todavia dijo...

Estuve leyendo larga y detenidamente en tu blog

Tienes razon en "Aqui estamos" En todos hay algo de nosotros mismos. Yo encontre mucho de mi aqui, tanto que me sorprende.

Lo mas hermoso es que encontre cosas distintas, parecidas, pero diferentes y fueron esas diferencias las que me invitaron a leer. Tienes un sitio genial y ha sido un suceso descubrirlo despues de medio dia pulsando el boton "Next blog" sin demasiada suerte. Voy a ponerlo en mis enlaces para no perderlo y regresar y regresar.

Saludos y gracias.

bornne dijo...

Te agradezco mucho tu comentario, Todavia.

Me alegra mucho que hayas encontrado de ti aquí y pasaré por tu blog a comprobarlo.

Gracias, de nuevo y buena semana. :)